Una inmersión profunda al skateart más subversivo es lo que propone Agents Provocateurs, un libro que revisa concienzudamente cien gráficos de skate que inducen a la reflexión.
Seb Crayol, columnista, comisario de arte y escritor, documenta aquí sobre la intención de crear un impacto en las conciencias, más allá del mero hecho de decorar la parte inferior de una tabla de skate, de un selecto grupo de artistas
Hubo un momento en que cualquier episodio social pasó a ser susceptible de ser distorsionado por la visión de unos señores que con sus lápices elevaron la sátira, la parodia y los mensajes envenenados hasta convertirlos en una rama del arte skate. Marc Mckee, Sean Cliver y Todd Bratrud, por nombrar solo a tres, renovaron la energía de la cultura cambiando calaveras y espadas por personajes de los dibujos de la Warner con el dedo del medio en alto o robando y rediseñando los logos de las multinacionales, entre otras muchas técnicas de provocación.
Cada uno de los cien gráficos está contextualizado por Crayol con la ayuda de su autor o de alguna persona involucrada en la creación del mismo, por ejemplo, acerca de la tabla Jim Thiebaud Hanging KKK, comenta Thiebaud entre anécdotas: «Era una idea que quería llevar a cabo desde hace tiempo, una declaración potente con una imagen simple. En aquel momento fue un mensaje claro, directo a la cara del que lo miraba. Iba a ser difícil de vender pero no nos importaba».
El libro está dividido en seis temáticas: sexo, violencia, drogas, actualidad, racismo, religión y política. Y enriquecido con sendas entrevistas a Marc Mckee, Sean Cliver, FOS, Aly Moore, French y Alex Kramer.
«¿Estos agentes de la provocación salvaron al skateboarding de convertirse en el nuevo ski? ¿De dónde vino esta necesidad constante de enfadar a la gente? ¿Qué dicen estos gráficos, en el fondo, sobre nuestra sociedad? ¿Quién, casi 25 años después, lleva la antorcha de la subversión gráfica? A lo largo de los años, me he hecho a mi mismo cientos de preguntas metafísicas como éstas. Lo necesario para encontrar la paz interior era ir a hablar con estos neodadaístas. Cada una de estas tablas tiene una historia. Escúchala, escúchala cuidadosamente, porque habla más alto que las propias tablas», dice Crayol en el prólogo.
Agents Provocateurs (Gingko Press) es una deliciosa pieza editorial que pone al día al lector sobre la importancia del mensaje en las tablas de skate, pero también le recuerda sobre el poder del skateboarding para analizar la actualidad y pararle los pies al mundo diciéndole, inteligentemente, que te jodan!
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